Bienvenus, wellcome, bienvenidos, benvinguts:
He aquí un elemento diferencial del espacio-tiempo que trata absolutamente de nada. Pero donde no hay nada, tiene lugar de todo, aunque todo no valga. Dediquemonos con delicadas o extravoltaicas formas de aristocracia: no hay nada más democrático que el placer.

miércoles, 24 de febrero de 2010

Cibeles y su armario EGO-latra Isabel Mastache O/I

¿Otoño-Invierno?

Por todo lo que he visto hasta ahora de Cibeles, la señorita diosa-plaza-fuente tiene que estar un poco destemplada, porque a juzgar por sus prendas de color (y dolor…) parece que nos muestra su guardarropa para el próximo verano.

Y es que el (agua de) tónico general para esta venidera temporada, es el color sobresaturado y desaturado a tonos pasteles, la mezcla de los mismos y también los clásicos más autumnales como el gris, negro y blanco metamorfeados en cuadros y pata de gallo.

¿Es esto una premonición o cuanto menos, una seña de la esperanza en cuanto a la crisis y su tizne haraposo?

 

Isabel Mastiche

De todas las posibles formas, empezaré por aquella en la que Cibeles muestra su reflejo en el espejo más EGO-latra. Reflejo enmarcado en un espejo romántico pero con formas volum-voluptuosas rozando lo barroco-có. En su placa, puédese observar la signatura de Isabel Mastache. Y a mi juicio (de Paris), me decanto por ella por su belleza, que no por su comodidad o funcionalidad.

Y es que con una paleta, bastante suave pero de pigmentación múltiple Mastache parece inspirarse en el folklore de muchas culturas, para desvelarnos casi esculturas de cuento (sea visto el momento brazo d“el hombre de hojalata”). Pero el volumen esculpido también se manifiesta en una forma más fetichista bajo los ángulos de los sombreros que se hibridizan en máscara. isabel-mastache--11--100201010403-59264_base

Esta compenetración entre folklore pastel con aires románticos dan a la colección unos aires inocentes dentro de la complejidad que conciernen.isabel-mastaeche--2--100201010401-59264_base

Y es que la hibridación, quizás sea la palabra clave de esta colección neobarroca que navega entre las aguas de la escultura fraguada con “la prenda”. Entre las aguas de una cultura, y la de otra. La del complemento y la del completo.

isabel-mastache--13--100201010400-59264_baseY es que seguro que nuestra queridísima Róisín Murphy apostaría por estos modelitos arquitectónicos, aunque en un modo más naïf.

Una auténtica pena que no sea nada ponible, ni siquiera para ciertos eventos…

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martes, 16 de febrero de 2010

Euterpe y las ondas electropópicas: Annie

Hace no mucho, la voz de melodías puramente electropop publicó su segundo disco: “Don’t stop”. Apropiado título para una cajetilla que tiene mucho para “no parar” de bailar, y al cual últimamente soy muy asiduo. Donc, je viens de décidér hacer un post en su honor, con lo mejor de ella.

Lo cierto es que sólo tiene dos discos dados a la luz, y si el primero no me terminaba de convencer, (salvo algún tema: “Greatest Hit”, “Chewing gum”, “me plus one”), este último me parece de lo más pop en clave electrosintética que he escuchado últimamente. Cuando digo pop, digo facilidad de la escucha, despreocupación por una hiperintelectualidad, toques un poco naïf o infantiloides, reminescencias del dance de los ochentas o claramente referencias a Madonna (sample de Everybody en “Greatest Hit”). Por supuesto, la inducción a la pista de baile sin necesidad de la bioquímica de alkaloides también suele ser producto de este género.

Además, de empezar por un circuito indie en el que electropop (de hecho se le considera a veces la Kylie indie) más básico en principio no es muy bien bienvenido. Annie tuvo bastante buena acogida con el ya mencionado Greatest Hit. Es más, al final la noruega tiene hasta un DJ-kicks, ahí es nada.

En rosa, azul y blanco neón se desdibuja la carátula del EP “Anthonio” (ya es que hasta me dedican canciones y todo…) con un slow-dance-rythm en clave melancólica perfecto para unos bailes de algún sábado que, como bien relata la nórdica seguramente acabará en panderetazo incompletamente correspondido. Excelentísimo remix incluido (Designer drugs remix).

Pero “Don’t stop” se abre con una adictiva presentación (“Hey Annie”, producida por Paul Epworth (Bloc Party, Florence and the Machine) que alterna momentos hip-hop o casi mejor dicho hip-pop, con la angelical voz de Annie con el mismo contraste que emana de las campanillas con la vibrante base del corte.

Pero hasta la mitad del album, no encontramos el que debería ser todo un hit, de los que nos gustaría oír en esos sitios que dicen ser pop, sin ser nada de eso… “Songs remind me of you”, tiene tónica melancólica con ritmo y melodía vaporosa que vuela con fluidez gracias a la voz casi susurrada de Annie. Los sintetizadores en modo eighties no dejan de cabalgar las pulsiones por bailar el tema, y los ecos y capas superpuestas de la letra no paran de hacernos pensar que estamos en una especie de un “disco astral”. Obra maestra de Richard X (electropop con tinciones retrosintéticas: Róisín Murphy, Sugababes sampleando a Gary Numan). Must auditivo con videoclip paralelo de escasa producción pero que se ciñe perfectamente a la estética ochentera.

Sin embargo, no todo va a ser pista de baile y hay (pseudo) baladas también con miradas un poco más retrotemporales como puede ser en la burbujeante “Marie Cherie”, que coquetea con cierto regustillo a ¿Goldfrapp? o a banda sonora de los sesenta en clave veraniega.

Más oscura, pero más interesante tenemos a “take you home” para dar un giro radical en el corte siguiente: “the breakfast song” con el que se despliega una artillería un poco más psicodélica y más divertida… sólo hay que leer el título de la canción.

Y por supuesto un poco de petardeo no puede faltar, sobre todo si añadimos un poco de spanglish: “Loco”. Relativamente perdonable…

Y a Xenomania (Pet Shop Boys, Kylie) debemos agradecer la estupendísima balada “When the Night” otro dramón para la intimidad.

En definitiva, un disco bastante divertido con sus tonos melancólicos que juguetea con bastantes subvariantes sin perder homogeneidad sonora. Todo ello la hace idónea para casa, ipod (apple nos merece) y para el fin de semana. No en vano NME o Pitchfork no bajan el album del 8 o del 7.2 respectivamente…

Puedo declarar pues, que Annie me merece…

sábado, 13 de febrero de 2010

Photosession: Hipotenusa

Aquí tenemos una de las últimas photosessions, aunque no la más actual, puesto que nuestra amiga/colaboradora A. no tiene tiempo de editar el digital celuloide impregnado de sales de plata… pero todo se andará.

Claro que, también he tenido que estar en busca y captura de estas… pero ya las tengo.

Esta serie de 5 fotografías forma parte de un proyecto dividida en 3 partes, las otras dos, verán la luz a lo largo del año… ya veréis. El proyecto en cuestión, Hipotenusa, va acompañado de cierto texto de presentación el cual el autor no ha podido facilitarme a día de hoy, pero que espero que lo haga pronto pues no quiero hacer resumenes por temor de ser impreciso. Y es que el texto tampoco tiene desperdicio. Lo único que cuento es que el papel que representa mi persona…. no se puede ceñir mejor a la vida misma…

Por último, reseñar que las fotos fueron tomadas por Óscar González González, licenciado en Hª del Arte, y estudiante de fotografía.

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